miércoles, 28 de octubre de 2009

No puedo

(No me guzta verme azí)

1. No puedo con los macroconciertos. Viendo un vídeo de un directo de Franz Ferdindanz en Glastonbury me he dado cuenta de que, desde el punto de vista de los cantantes, los conciertos parecen de lo más ridículo, con esa masa ingente dando botes debajo. Entiendo que con el P2P los artistas tengan que vivir de algo, pero el boom de los conciertos de esta década me parece un poco cansino. Es una pena que el mercado obligue a estas cosas, en vez de potenciar la distribución del vídeo musical con un buen canal de música.

2. No puedo con lo último de la iglesia católica para evitar la deserción de curas gays que no aguantan más el celibato: han decido obligarlos a casarse con mujeres. Ya han empezado a permitir curas casados (de momento sólo los protestantes reconvertidos, pero al tiempo).

3. No puedo con los talleres de teatro, con los sueños frustrados, con la lucha de egos (o los egos revueltos, como dice Juan Cruz), con la división en tres actos, con las lecturas dramáticas, con entrar lo más tarde y salir lo antes posible de una escena, con el teatro catalán, con el proceso creativo, con los clásicos, con el arco del personaje, con las noches de estreno, con mi falta de perspectiva…

4. No puedo con la noche en Madrid. Me aburrooooooo.

5. No puedo con no encontrar cartas en mi buzón. No ha sido el correo electrónico, ni siquiera el móvil lo que ha acabado con las cartas. Es la tarifa plana de teléfono fijo. Antiguamente (qué horror decir eso para referirse a los 25 años de uno), los amigos te llamaba un par de veces por semana y siempre terminaban diciendo: “venga, a ver si me pongo este fin de semana y te escribo”.

6. No puedo con la falta de buenas librerías en Madrid. La única que tiene un pase, la sucursal de La Central del MNCARS, donde no es que tengan un buen surtido, pero por lo menos tienen un catálogo on line donde puedes pedir de todo. Barcelona, siempre por delante…


jueves, 22 de octubre de 2009

Ya está aquí el otoño

Mañana termino el curso de "Estructura dramática" de Fermín Cabal en la AAT. Hacía mucho tiempo que no me lo pasaba tan bien en una clase, desde las de Roberto Mayoral, creo. Cuando alguien es capaz de tenerte cuatro horas seguidas, sin descanso, pendiente de lo que dice, es un buen profesor. Me consolaré leyendo sobre todo lo que se ha hablado. Tengo lecturas hasta primavera...

miércoles, 14 de octubre de 2009

Mayte Martín y la melancolía virtual

La Mayte ha vuelto a sus orígenes, a aquellas canciones que compuso para su primer disco, como “Navega Sola” (que cantó Poveda con el culo al aire en La Teta y la Luna), “S.O.S.” (que hizo copla Falete, gracias a Dios con el culo tapado) o “Zafiro y Luna” (una preciosa balada a ritmo de bulería), en este nuevo disco que acaba de sacar llamado “Al Cantar a Manuel” que, a parte del juego de palabras, de no ser ella tan melindrosa con el flamenco “no intelectual”, el flamenco del duende, el flamenco de postal, podría llamarse Al Cantar a Málaga.

Unas canciones llenas de melancolía, una melancolía virtual, pues ya digo que tiene ella una relación muy de matar-al-padre con el Sur, musicadas a partir de poemas de Manuel Alcántara donde se habla de los montes de Málaga, la mar, el puerto, Gibralfaro, la plaza de la Merced, los baños del Carmen…



Fue un proyecto de encargo de la Bienal de flamenco de Málaga (hoy desaparecida) al que ella, disidente y fugitiva siempre, respondió haciendo una obra de no flamenco (sólo dos canciones, "A Miguel Hernández" y "La paloma de Picasso" tienen un eco de bulerías y alegrías, respectivamente).

Ejemplo de cómo no es necesario echar mano de la alta literatura (esos discos fallidos de Poveda cantando a Alberti, Carmen Linares cantando a Juan Ramón, etc.) para hacer buenas canciones. Con todos mis respetos para la poesía de Alcántara, del que sólo puedo decir que no era yo muy devoto de sus columnas periodísticas.

Termina el disco con unos versos sobre la muerte en mi canción favorita (“No pensar nunca en la muerte”), que no puedo dejar oír esta semana cada vez que se pone el sol en ese mar que tiene Madrid en la Casa de campo.

“No pensar nunca en la muerte,
Y dejar irse las tardes mirando como atardece
Con toda la mar de frente
Y no estar triste por nada mientras el sol se arrepiente
Y morirme de repente el día menos pensado
Ese en el que pienso siempre.”




martes, 13 de octubre de 2009

Pedronélope

Creo que deberían llamarles Pedronélope, como a Brangelina (por cierto, qué poco gloriosos los bastardos de Tarantino que vi anoche, uno de los bluffs más hinchados del año). En esta foto en Nueva York me recuerdan precisamente a la pareja que hacían Jose Luis Gómez y Penélope en Los abrazos...

viernes, 9 de octubre de 2009

Alejandro y Alejandría

Parece ser que hoy no eres nadie si no tienes tu bestia parda, ese crítico que reduce a cenizas todo lo que haces, que se regodea en tus flaquezas, aun siendo consciente de tus virtudes, que quizás no son para tanto, pero para él son todavía menos, sobre todo si van acompañadas de un cierto éxito comercial. Es el caso de Almodóvar, que tiene su bestia parda en Boyero desde hace años, y de repente también de Amenábar, personificada en el crítico Jordi Costa (que por cierto da un curso de crítica de cine por 800€ en la Escuela de escritores, ya mañana).

J.C., como le gusta firmar en El País, ha escrito un cómic para arramblar con la figura de Amenábar llamado “Mis problemas con Amenábar”. Ni que decir tiene que me lancé a las librerías a devorarlo como un león una buena paletilla de gacela.



No era para tanto. Yo esperaba un ejercicio de periodismo-Sálvame-salvaje donde se contaran los más oscuros secretos de Alejandro, su entourage de La Boîte, el número de puertas de diseño de su casa, etc., etc. Creo que lo peor que se cuenta de él es cuando dice que en el Festival de Málaga le pareció hasta guapo. Ni siquiera un mísero detalle de esos retoques en la cara…

En fin, que J.C. hace un ejercicio de crítica "presuntamente" (de nuevo Sálvame) demoledor en el que viene a decir que el cine de Alejandro no es para tanto y que le da coraje que todos le bailen el agua cual flautista de Hamelín. Menuda novedad. Yo mismo me negué a ver más películas de Alejandro después del éxito de Abre los ojos en señal de protesta ante tanta mediocridad (carcomido por la envidia). Y lo he cumplido. Pero vamos, atacar a Alejandro porque se hizo una foto con Ana Botella y criticó la estructura dramática de Vértigo de Hitchcock (a mí ese doble tercer acto tampoco es que me vuelva loco…) no me parece elegante.

Mañana se estrena Alejandría, la nueva película de Alejandro, y le deseo lo mejor. Yo no voy a verla, por lo mismo que no vi Los Otros ni Mar adentro, porque soy un hombre de palabra, pero desde aquí rompo una lanza en favor de Alejandro. Hay gente que nace con una flor en el culo y se lo merece.


sábado, 3 de octubre de 2009

Máscaras

Ayer fui con Marcos y Chendo a ver Màscares, un documental sobre el oficio de actor, protagonizado por Josep Maria Pou (que me encantó en La Cabra de Albee). Pero no es sólo el oficio actoral, refleja además la construcción de una obra de teatro, desde que la concibe el autor hasta su opening night, pasando por las lecturas dramáticas, la introducción de luces, vestuario, etc.



Me encanta Pou, no sólo porque sea de Mollet. Recuerdo que me lo encontré hace un par de años desayunando en Málaga, en la plaza de la Merced, y me impresionó mucho. Me encanta su casa llena de libros, dvd y cd; su sillón de lectura; que inaugurara el Teatre Goya con Els nois de història, de Alan Bennet (autor que también me encanta, recomiendo la novelita Una lectora poco común); que interpretara Roy Cohn en la versión de Àngels a América de otro Josep Maria (el Flotats), obra que inauguró otro teatro, el TNC.

En fin, que está en el Pequeño Cine Estudio, antiguo cine porno donde ahora trabaja Nacho de Granada, aunque anoche no estaba. Hace siglos que no le veo.

jueves, 1 de octubre de 2009

La rentrée

Desde que empecé el taller de Estructura dramática no tengo tiempo ni de limpiarme el culo. Con las lecturas y las películas que tengo pendientes no voy a salir del sofá en meses (acabaré como Capote, en esta gran foto de Slim Aarons), pero bueno, el finde pasado saqué unas horas para abrir la temporada teatral.



Películas de las últimas semanas (puede que me repita, porque ya he perdido el hilo):

Auntie Mame (1958), basada en la divertidísima novela Mi tía y yo de Patrick Dennis; Remembering the night (1940), otra de Leisen con Barbara Stanwyck haciendo de mujer mala que se redime, con esa voz de tela vaquera, y ya he perdido la cuenta...; Trick (1999), sobre un escritor de musicales en Nueva York que se lía con un gogo, simpática; La vida íntima de Julia Norris (1946), un dramón de Leisen con una Olivia de Havilland en estado de gracia; Hacemos una porno (2009), lo siento, todavía hay un grunge dentro de mí; Seis grados de separación (1993), para reírse del upperside, aunque tiene un final muy triste y sospecho que dramáticamente flojo; Casado y con dos suegras (1951), un divertimento de Leisen al servicio de la gran Thelma Ritter; The September Issue (2009), la patochada que han hecho para rebatir El Diablo se Viste de Prada…

Teatro del fin de semana:

Groucho me enseñó su camiseta, un homenaje cabaretero a las canciones que escribió Montalbán en los setenta para los musicales Guillermotta en el país de las Guillerminas o Flor de nit, un poco setentas trasnochado, pero a Manolo se lo perdonas todo. El responsable de dramaturgia (Damià Barbany) no es que se quebrara la cabeza, y en interpretación faltó un poco de punto canalla, pero Annabel y yo lloramos con la canción Barcelones y Chendo sacó una idea para un musical, así que todos contentos.

¿De cuándo acá nos vino?, de Lope de Vega, una comedia divertidísima para la que nos consiguió entradas Becky, que ha vuelto con ganas de calentar butacas, aunque ese día no pudo. Qué decir de este vodevil ambientado en un Madrid de entreguerras al que llegan los soldados de los tercios de Flandes a pecho descubierto dispuestos a mentir lo que haga falta para encontrar calor y favores en las mujeres de la corte. Pues que viva ese señor, aunque no sepamos de dónde nos vino. Una puesta en escena muy sexy…

2017: tibio y desafecto

Ay, que ya nadie se acuerda de 2017. Aquí va mi resumen: Lo mejor del año  * La frase de "Juego de Tronos": “Maybe it real...