martes, 17 de agosto de 2010

Confesiones en la elíptica

Hay una escena que se repite en las comedias románticas que estoy viendo últimamente y es la de las confesiones entre dos amigas mientras sudan en la elíptica, de lo que se deduce que si quieres tener en tu vida romance o comedia, debes ir al gimnasio. A mí, la elíptica me da la risa, no sé, la encuentro una máquina muy graciosa.


Todo esto viene a propósito de Mi segunda vez (The Rebound), la película que hay ahora en cartel con Catherine Zeta-Jones (su nombre también me da la risa). Una nueva comedia de madura-se-lía-con-niñato, y van...

Todo empezó con El crepúsculo de los dioses, en el fondo la más realista de todas. Aunque William Holden tenía ya 32 años (de los de entonces), para la Swanson era sólo un pipiolo (“What I'm trying to say is that I'm all wrong for you. You want a Valentino, somebody with polo ponies”). Sorprendentemente, el mismo año llegó Bette Davis en Eva al desnudo y la cosa tomó un cariz menos gótico. Me encanta cuando Margo confiesa que admitir su edad le hace sentir como si se hubiera quitado toda la ropa y, refiriéndose a su novio, ocho años más joven: “Bill tiene treinta y dos. Aparenta treinta y dos. Los aparentaba hace cinco años y los aparentará dentro de veinte. Odio a los hombres”. Las cosas no fueron mucho mejor en la que se considera la película estandarte del género, "El graduado".

Luego llegaron los ochenta: Ricas y famosas (que un niñato te cite a T.S. Elliot y D.H. Lawrence really puts you off), Harold and Maude (con esos suicidios fingidos…), Class (de nuevo Jacqueline Bisset), Pasión sin barreras (con Susan Sarandon, de las primeras en liarse con un joven en Hollywood, Tim Robbins). Y así hasta nuestros días, con Diane Keaton y Keanu Reeves en Cuando menos te los esperas; Diane Lane en Infiel de Adrian Lyne; la Pfeiffer en El novio de mi madre (bastante mala) y Cheri; y mi favorita absoluta de todas: Prime (Secretos compartidos), con Uma Thurman y mi adorado Bryan Greenberg.

Ha llovido mucho desde que Goldie Hawn (Si no es caniche, no es Goldie) dijera aquello de: “Sólo hay tres edades para la mujer en Hollywood: la tía buena, la abogada y “Paseando a Miss Daisy”, ahora también está la de me lío con un niñato.

La solución al conflicto de edad en “Mi segunda vez” -donde, para los que no vayan a verla, Catherine se lía con su el niñero de sus hijos, se queda embarazada y pierde al hijo-, es que se separan y él se va a recorrer el mundo, hasta que adopta un niño en la India y todos se vuelven a reunir cinco años más tarde. Delirante. Y esto nos lleva a un nuevo género: la comedia romántica de ciencia ficción (si no toda comedia romántica lo es). Se trata de aquellas películas en las que, como en esta o en “Plan B" de Jennifer López, después de la escena de la elíptica, el chico no sólo te regala flores, sino que está dispuesto a ayudarte con tu embarazo previo. Oh my God con América!!! Menos mal que viene Jota esta semana, que es el único que me entiende con estas películas.


2 comentarios:

joseph john dijo...

ya me gustan hasta las de serie "c", estoy bajando el nivel a pasos agigantados...jejejjeje espero que sigamos en esta linea....

Anónimo dijo...

Jota Efe también sube y suscribe vuestros gustos, de la C a la Z

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