El festival Escena contemporánea le dedica un ciclo a David Hare, el gran dramaturgo británico, conocido además por ser el guionista de Las horas, El lector o Herida. David Hare dio una conferencia hace tres semanas en el Reina Sofía donde estuvo dos horas hablando de su carrera e inevitablemente de los últimos 30 años en Inglaterra. Bromeó con el teatro francés (según él, en Francia sólo tienen Boulevard, Avant-garde y la Comédie), explicó su compromiso político y habló de la necesidad de un teatro que refleje temas actuales. Las obras que se han estrenado luego dentro del festival no han estado a la altura: The Blue Room (que hizo Nicole Kidman en Broadway en 1999) y Skylight me dieron vergüenza ajena directamente. El teatro alternativo es lo que tiene.
En 2003, Calixto Bieito le dedicó un ciclo en el Teatro Romea de Barcelona, donde se representaron sus tres últimas obras por aquel entonces: “La brisa de la vida” la hicieron Amparo Ribelles y Núria Espert (en Londres fueron Maggie Smith y Judi Dench); “Skylight” (Celobert) con Josep Maria Pou y Marta Calvó; y “My zinc bed” (El meu llit de zinc), con actores menos conocidos. En Madrid, Joaquín Kremel es especial fan de Hare, pues ha estrenado "Skylight", "El beso de judas" y "Vía dolorosa", su monólogo sobre el conflicto palestino, que el propio Hare interpretó en Barna en el Romea en el 2003.
Casualmente, las tres obras que estrenó Bieito son las que yo he leído de Hare, y las tres me encantan, sobre todo Skylight, que me marcó especialmente. No puedo con los que dicen que el teatro no es para leer, sino para verlo representado. Es más, soy de los que piensan que el teatro debería grabarse siempre. ¿De qué otra forma puedes ver las obras que te interesan? Con lo difícil que es incluso encontrar traducciones de algunos textos. Sin ir más lejos, Hare no se ha publicado nunca en castellano. Es cierto que la experiencia del teatro en vivo, cuando funciona, es exclusiva y mágica, pero no siempre tienes la edad, ni la ubicación ni el dinero para ver todo lo que te interesa. Es más, la versión de Skylight que se ha estrenado en el Escena contemporánea es para prohibir que se representen algunas obras.
martes, 16 de febrero de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2017: tibio y desafecto
Ay, que ya nadie se acuerda de 2017. Aquí va mi resumen: Lo mejor del año * La frase de "Juego de Tronos": “Maybe it real...
-
No voy tanto a Barcelona como me gustaría, pero bueno, aquí va una lista de mis favoritos y otros a los que quiero ir: Barna siempre por del...
-
Estoy harta de hacer la BBC (bodas, bautizos y comuniones), pero como el Hola paga, pues allí me colé y en su fiesta me planté, como cantaba...
-
Esta semana que ha muerto John Hughes y que de repente todas las modernas recuerdan El club de los cinco , La chica de rosa o Todo en un día...
1 comentario:
Nene, yo vi en Sevilla hace años La brisa de la vida y me pareció lo peor... un teatro muy, muy antiguo... Su crítica al teatro francés no la he entendido: Comédie sé lo que es (imagino que la Comédie Française) pero ¿qué es Boulevard y Avant-Garde? ¿El teatro de revista y el teatro de vanguardia? No sé cómo estará la cosa en Londres pero mucho me temo que, como en cuestión de cine, París es hoy por hoy la ciudad donde se ve el mejor teatro del mundo... no por el teatro que hagan los franceses sino porque son grandes "traductores" y tienen una sanísima tradición de apertura al mundo... ¿en qué otra ciudad puedes ver obras argentinas, camerunesas, italianas o austriacas (traducidas)? Y por supuesto anglosajonas... En ninguna.
Publicar un comentario